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El modelo de Hotelling y el márketing político en Antioquia

Si usted fuera un vendedor de helados en una playa ¿dónde se ubicaría para maximizar sus resultados económicos? El modelo de Hotelling plantea que puede resolver el problema considerando la distancia de desplazamiento, la ubicación de los competidores y la de los clientes. Algo similar sucede en las campañas políticas. Usted es un candidato que para vender su candidatura, debe considerar el valor para desplazarse, la ubicación de los otros candidatos y de sus votantes. En principio la lógica plantea una distribución media desde la izquierda hasta la derecha del espectro político para luego dar paso a la evidente ventaja que representa la ubicación en el punto medio para todos los competidores y ese punto medio en Antioquia está en la centro derecha.

El modelo de competencia espacial de Hotelling fue desarrollado por Harold Hotelling en un artículo publicado en 1929 bajo el título Estabilidad en competencia. Este modelo propone una noción de equilibrio óptimo que deben encontrar dos jugadores en disputa (duopolio), de acuerdo a tres variables clave: ubicación de los competidores, distribución de los clientes y costos de transporte. Inicialmente el modelo se ha aplicado para el ámbito empresarial pero recientemente se ha visto su aplicación práctica en términos políticos. Antioquia ha demostrado ser una región sui generis en Colombia. que no vota bien a los candidatos de izquierda. El plebiscito por la paz, la consulta anticorrupción y el triunfo de Iván Duque son muestra de ello.

Harold Hotelling publicó en 1929 Stability in Competition mientras trabajaba de profesor de matemáticas en la universidad de Stanford. En su artículo, describía cómo dos empresas en ciertas condiciones tenderían a competir de forma que desembocarían en una situación muy similar a un monopolio; no buscarían diferenciarse sino parecerse cada vez más, desmintiendo la intuición de que las empresas en competencia tenderían siempre a maximizar la satisfacción de los consumidores y a diferenciarse entre sí. Lo mismo podría aplicarse a los candidatos y los partidos políticos, verbigracia las numerosas democracias con dos partidos políticos hegemónicos que se parecen cada vez más.

En el departamento de Antioquia la mayoría de los votantes están en la zona de centro derecha del espectro político y se identifican con nociones de orden y progreso. Para explotar este punto, por ejemplo, dos candidatos a la Gobernación de Antioquia optarán por posiciones similares debido a la estabilidad inicial de la posición en el espectro político la cual se irá agotando a medida que lleguen más candidatos al mismo punto. La psicología y la economía, a través de lo que recientemente se ha llamado la Economía del Comportamiento o Psicología Económica, parece arrojar luces sobre el tema. Como las heurísticas se basan en algoritmos sencillos (secuencias de pasos) para la toma de decisiones, estos algoritmos pueden ser fácilmente manipulables. Heurística de representatividad, heurística de disponibilidad y heurística de anclaje, cada una con un principio activo clave para simplificar la elección por medio de atajos. Los estrategas políticos lo saben, los políticos de profesión lo entienden y los ciudadanos lo padecen.

Expliquemos brevemente cada una de estas heurísticas para entender mejor: la heurística de representatividad consiste en estimar la probabilidad de un evento B dado otro A. En política sucede, por ejemplo, cuando nos basamos en estereotipos para determinar el perfil de un candidato. Nos parece que por ser gordo y de baja estatura, representa la corrupción y el clientelismo. La heurística de disponibilidad se refiere a que cuanto más accesible sea un suceso, más frecuente y probable parecerá. De modo que si, por ejemplo, tenemos un recuerdo fácil de una dictadura cercana, creeremos que es altamente probable que en nuestro país también se pueda dar otra dictadura, aunque las circunstancias sean muy diferentes. Y finalmente la heurística de anclaje o ajuste implica partir de un número o un criterio para luego desplazarse hacia arriba o hacia abajo haciendo que parezca plausible. En marketing de consumo se utiliza para la fijación de precios y en marketing político, por ejemplo, para parecer más o menos extremo en posiciones políticas. Si soy un candidato de derechas y quiero parecer más moderado, me vendría muy bien que aparezca otro candidato de derecha con posiciones más extremas al igual que con un candidato de izquierdas. Pero como eso no depende del candidato entonces se suelen enunciar ejemplos de esas posiciones extremas, desde la misma campaña, para resaltar la distancia que separa una posición de otra.

Volvamos ahora al modelo. Si la posición óptima está cerca del punto de la centro-derecha, el candidato con mayores posibilidades tiene la tendencia lógica a ubicarse en este punto de la playa electoral. La competencia por este punto, hará que se sature la posición obligando a los demás candidatos a buscar posiciones diferentes donde, de nuevo, la ubicación de los competidores, distribución de los electores y costo de hacer llegar el mensaje vuelvan a ser rentables. El modelo plantea que dos empresas, o candidatos, pueden explotar la misma posición del espectro pero a medida que se suman más participantes al mismo punto disminuye la rentabilidad, de modo que a medida que más candidatos se hacen en el mismo punto, menos atractivo económica y políticamente se vuelve.

Sin embargo, el desplazamiento hacia otros puntos del espectro político puede no ser lo suficientemente rentable (extremo derecho o izquierdo). Es decir, no encontrar allí el número de votos que hagan posible el triunfo electoral. En este punto la campaña se encuentra en el dilema de buscar alianzas para sumar votantes o definir una campaña de flanqueo, que le apueste a una sorpresa en el proceso electoral. Así como es muy probable que en poco tiempo dos heladeros acaben poniendo su puesto de venta muy cerca el uno del otro, sucede lo mismo con dos partidos políticos y sus candidatos. Claro, no tan cerca como para que a los clientes, o los votantes, les de igual a cuál elegir pero sí muy próximos para mantener las ventajas de ubicación de los competidores, distribución de los clientes y costos de transporte. El modelo siempre será una simplificación de la realidad y por lo tanto aunque no la explica totalmente sí ayuda a comprenderla mejor. Tal vez en la próxima campaña en Antioquia o cualquier lugar del mundo, podamos verlo en acción y entender mejor lo que sucede, gracias a Harold Hotelling.

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